En un documento publicado en la página oficial del CIN, la entidad junto al Frente Sindical de Universidades Nacionales y la Federación Universitaria Argentina (FUA) manifiestan “profunda preocupación por el dictamen de la Comisión de Presupuesto de la Cámara de Diputados que no solo no modifica el proyecto de presupuesto enviado por el Poder Ejecutivo —que oportunamente advertimos que resultará insuficiente de aprobarse en esos términos para resolver los problemas presupuestarios y salariales del sistema universitario—, sino que, además, incorpora un artículo que pretende derogar por simple mayoría la Ley de Financiamiento Universitario que debimos sostener con mayoría agravada y que hoy su ejecución se encuentra pendiente de resolución en el ámbito judicial”.

En este sentido las entidades universitarias mencionadas exhortan a “las y los legisladores que nos acompañaron —comprendiendo nuestras preocupaciones y la manifestación contundente de la sociedad argentina— en los debates legislativos que permitieron sostener una ley clave para el funcionamiento universitario a que mantengan su posición. Este dictamen no corresponde, es una provocación innecesaria y empuja a la comunidad universitaria y científica del país a una crisis aún más profunda que la actual”, dice el documento.

Al mismo tiempo advierten, “con la gravedad del caso y el tiempo suficiente, que en estas condiciones es imposible que las universidades públicas podamos desarrollar con normalidad todas las actividades en el 2026”.

En la entrevista en “Apuntes y Resumen” de Radio UNR Oscar Alpa, presidente del Consejo Interuniversitario Nacional (CIN) y rector de la Universidad Nacional de La Plata, expresó su preocupación por el presente que atraviesa el sistema universitario argentino. Según explicó, las dificultades financieras no solo afectan el funcionamiento cotidiano de las instituciones, sino que ponen en riesgo la continuidad de proyectos académicos, científicos y de extensión que cumplen un rol clave en todo el país.

Alpa señaló que la universidad pública no puede pensarse como un gasto prescindible, sino como una inversión estratégica para el desarrollo nacional. En ese sentido, advirtió que la falta de actualización de los presupuestos impacta directamente en salarios, becas, infraestructura y en la posibilidad de sostener investigaciones. También remarcó que las universidades siguen funcionando gracias a un fuerte compromiso de sus comunidades, aunque aclaró que ese esfuerzo tiene un límite.

El titular del CIN insistió en la necesidad de abrir instancias de diálogo con el gobierno nacional para encontrar soluciones de fondo. A su entender, las decisiones coyunturales no alcanzan para resolver un problema estructural que se arrastra desde hace años y que hoy se profundiza. “La previsibilidad es clave para planificar”, remarcó al referirse a la importancia de contar con políticas educativas estables y consensuadas.

Finalmente, Alpa subrayó el valor social de la universidad pública, especialmente en regiones donde es el principal motor de movilidad social y desarrollo local. En ese marco, sostuvo que defender el sistema universitario es también defender el derecho a la educación, la producción de conocimiento y el futuro de miles de estudiantes que ven en la universidad una herramienta de transformación personal y colectiva.